San Juanito
Plomo policromado, madera dorada y policromada
52 x 24 x 22 cm. Peana 17 x 32 x 24 cm
Juan de Mesa
Taller sevillano de fundición
Primer tercio del siglo XVII
Monasterio de Santa María del Valle, Zafra
El uso del plomo en la producción seriada de esculturas devocionales tendrá su principal centro fabril en Sevilla durante el siglo XVII.
La causa deriva tanto de la enorme cantidad de encargos de obras piadosas destinadas al comercio ultramarino, como de su inferior valor respecto del bronce y la facilidad que tenía, mezclado con algo de estaño y antimonio (peltre), para su fundición, retoque y posterior policromía.
El modelo más demandado fue el del Niño Jesús triunfante, que deriva de arquetipos realizados por Juan Martínez Montañés y Juan de Mesa. Del modelado por este último proceden el Niño Jesús bendiciendo, que puede verse expuesto en el Museo (Intramuros. Fortaleza interior), y este San Juanito.
La imagen infantil de San Juan Bautista, aunque muestra similar contrapposto, anatomía mórbida y cabellos encrespados, se diferencia de la de su pariente en la disposición de los brazos: mientras el derecho lo baja para señalar el cordero que evoca a Cristo, el izquierdo se alza para sujetar una cruz y la filacteria en la que se leería Ecce Agnus Dei.
En fecha desconocida la imagen debió sufrir un percance. Cayó de cabeza, el golpe la hundió parcialmente, modificó su postura y es causa de otros desperfectos que presenta y demandan su restauración.
Aunque de la misma época, la peana no es la original ya que muestra en el frente el anagrama [To S (corazón) J A], que no parece se corresponda con el santo precursor.